La acción de pintar es una cuestión histórica relacionada con estar en el mundo y dejar un testimonio.
Mi trabajo busca repetir esa acción, en parte como interpelación a la obra de arte basada únicamente en el concepto o en la idea.
Acción del cuerpo y marca en la tela.
Ya sean flores, paisajes, piedras, usando acuarelas, aerosol o tintas, lo que importa es pintar y que el hecho se sostenga hoy y sostenga la historia de la pintura.
La certeza está en retomar esa acción. Luego qué se pinta es una deriva, un camino de imprevistos, un abrir y cerrar ventanas permanentemente y dejar entrar lo que resuena en esa pintura en particular.